Queratocono
El queratocono es una enfermedad de la córnea que evoluciona de forma progresiva. Con el paso del tiempo la córnea adopta una forma cónica irregular debido a la alteración de la estructura interna del tejido corneal, concretamente del colágeno corneal.
Los principales signos anatómicos del queratocono son el adelgazamiento de la córnea en su zona central o paracentral, acompañado casi siempre de una elevación en esta zona y un alto astigmatismo irregular, lo cual provoca necesariamente mala visión.
El astigmatismo irregular no se corrige con los medios tradicionales (gafas o lentes blandas) siendo necesario el uso de lentes de contacto duras (cuyo porte es incómodo) para conseguir una buena calidad de visión.
En los estados avanzados, el queratocono provoca una muy mala calidad de visión y el adelgazamiento de la pared corneal puede ser tal que se produzca su rotura siendo necesario un trasplante de córnea para evitar la pérdida del globo ocular.
¿Cómo evitar el avance del queratocono?
El queratocono tiene tratamiento, en principio se le deja avanzar en espera de que se estabilice y deje de progresar, si esto no ocurre se recurre a un trasplante de córnea para reemplazar la córnea afectada.
Los avances en la oftalmología hacen que actualmente haya dos tratamientos disponibles que detienen el avance del queratocono y en algunos casos reducen el astigmatismo corneal mejorando la calidad de visión.
Tratamiento Crosslinking Corneal Transepitelial
El llamado crosslinking corneal transepitelial es el proceso por el cual se consigue generar nuevas uniones, o puentes, entre las cadenas del colágeno corneal existente, reforzando y cohesionando así el tejido corneal y haciéndolo más resistente a la progresión del queratocono.
La activación con luz ultravioleta de la riboflavina estimula la regeneración del colágeno corneal. Para conseguir esto, se empapa el tejido corneal con riboflavina y a continuación se irradia la córnea durante 30 minutos con una luz especial dentro del rango del ultravioleta. Esto produce la creación de nuevos puentes o uniones entre las cadenas de colágeno reforzándose el tejido corneal.
La nueva técnica transepitelial supone una importante mejora en cuanto al confort del paciente y reduce los ya de por si escasos riesgos de este tratamiento. La riboflavina transepitelial tiene la propiedad de atravesar el epitelio corneal. Con esta técnica no es necesario retirar el epitelio, con lo que se eliminan los riesgos que esto conlleva y hace que el tratamiento no sea en absoluto doloroso ni requiera tiempo de reposo o baja médica.
Tratamiento con Implante de Anillos Intracorneales
Los anillos intracorneales son dos segmentos de metacrilato, con forma de dos semicírculos, con un grosor variable según lo que necesite el paciente. El cirujano los coloca en el interior de la córnea (estructura más externa del ojo), en su zona periférica, lejos de la zona central del ojo, para evitar el área visual central.
Una vez implantados, y gracias a un efecto mecánico, tensionan y aplanan la córnea central (lo mismo que hace el láser), consiguiendo tratar hasta 4 dioptrías de miopía y 6 de astigmatismo, produciendo un efecto de regularización de la córnea. A menudo detienen también el avance del queratocono. Permanecen inmóviles e invisibles a simple vista, ya que son transparentes como el tejido corneal donde están colocados.
La calidad del tratamiento depende del método empleado para hacer el túnel en la córnea donde se aloja el segmento implantado. En Vistaláser Oftalmología lo realizamos con el láser de femtosegundo que es el método reconocido como más seguro y preciso.
El tratamiento se realiza en unos 30 minutos, no quedando el paciente ingresado en la clínica. Se utiliza anestesia local por gotas y al día siguiente se hace vida normal.
En la mayoría de los casos, se detiene el avance del queratocono y se mejora la visión del paciente.