Conjuntivitis alérgica, síntomas y tratamiento

La conjuntivitis alérgica es la causa que motiva muchas visitas al oftalmólogo. Especialmente durante los meses de primavera debido al incremento de polen en el ambiente. En este artículo vamos a comentar los síntomas habituales y posibles tratamientos de la conjuntivitis alérgica.

La reacción alérgica se produce porque nuestro sistema inmunológico reacciona de forma desproporcionada frente a una sustancia. Es decir somos hipersensible a ellas, y cuando estas sustancias llegan a la conjuntiva del ojo ésta se irrita dando lugar a una conjuntivitis alérgica.

En la mayoría de los casos la conjuntivitis alérgica no es un problema grave, en las clínicas oftalmológicas Vistaláser de Málaga, Marbella y Granada solemos atender a pacientes con estos síntomas, no obstante debemos darle solución ya que podría ir a más dependiendo del nivel de alergia, llegando incluso a afectar a la córnea (queratoconjuntivitis).

La sustancias o alérgenos pueden ser simples partículas de polen o polvo, pelos de animales, restos de alimentos, entre otros. Por tanto, si tenemos claro que no se trata de un resfriado, sino que es una reacción alérgica deberíamos acudir al alergólogo para realizar las pruebas pertinentes.

Síntomas de conjuntivitis alérgica

Los síntomas de conjuntivitis alérgica son fáciles de confundir con un simple resfriado, la clave está en su persistencia en el tiempo. Cuando sentimos picor o irritación ocular, los ojos se enrojecen, se hinchan los párpados, y sufrimos lagrimeo durante varios días es probable que sea una conjuntivitis alérgica.

En caso de duda siempre podemos acudir al oftalmólogo para que realice una revisión de nuestra salud ocular, como médico nos puede recetar algún tratamiento farmacológico para aliviar los síntomas. Dependiendo de la gravedad y sobre todo si desconocemos la causa de la reacción alérgica es posible que nos derive a un alergólogo.

Conjuntivitis alérgica y lentillas

Muchas personas utilizan lentillas como corrección óptica, puede ser una buena alternativa a las gafas, sin embargo el problema surge cuando sufrimos conjuntivitis alérgica, ya que la lente de contacto contribuye a la acumulación de alérgenos en la superficie del ojo.

Si queremos seguir usando lentillas conviene extremar la higiene, usar lentillas diarias desechables, evitar en la medida de lo posible el contacto o exposición a alérgeno, y nada de frotarse los ojos.

Otras opciones para minimizar los síntomas de alergias oculares pueden ser usar gafas o bien optar por una cirugía refractiva que le ayude a reducir e incluso eliminar su dependencia de gafas y lentillas.

Tratamiento de la conjuntivitis alérgica

Para el tratamiento de la conjuntivitis alérgica son importantes dos cosas: primero evitar la exposición al alérgeno en la medida de lo posible y en segundo lugar seguir el tratamiento médico que nos haya indicado el oftalmólogo.

Cerrar las ventanas cuando estamos en casa, en nuestro lugar de trabajo o en nuestro vehículo. Además hacer uso del aire acondicionado que dispone de filtros ayuda a reducir la exposición al polen. El uso de gafas de sol cuyo diseño es envolvente para hacer de barrera también ayuda.

Cuando el problema es el polvo la limpieza es primordial, deberíamos evitar el uso de moquetas, alfombras, cortinas y cualquier textil que acumule polvo fácilmente. Si su alergia se debe al pelo de animales u otras sustancias debe evitar el contacto directo e indirecto.

El tratamiento más básico de la conjuntivitis alérgica pueden ser lágrimas artificiales. Es una solución salina que ayuda a limpiar la superficie de nuestros ojos eliminando los posibles depósitos de alérgenos. Su composición es muy similar a nuestra lágrima por lo que también contribuye a una buena hidratación ocular y alivia los síntomas de alergia.

Como tratamiento farmacológico nos pueden recetar en principio antihistamínicos, un fármaco con escasos efectos secundarios que bloquea los receptores de la histamina (la sustancia que trata de defender nuestro cuerpo de forma exagerada), lo que reduce e incluso elimina los efectos de la alergia.

Si el tratamiento con antihistamínicos no es suficiente, el médico puede recetar corticoides, unas hormonas con propiedades antiinflamatorias e inmunosupresoras. En última instancia están los inmunosupresores tópicos, que se reservan para los casos severos de conjuntivitis alérgica.