Conjuntivitis

La conjuntivitis es una enfermedad ocular que prácticamente todo el mundo ha sufrido en algún momento. Puede ocurrir por diversas razones, pero todas ellas provocan una inflamación de la conjuntiva. Este elemento es una fina membrana que cubre la superficie exterior del globo ocular y el interior del párpado.

Los síntomas habituales incluyen ojos hinchados y enrojecidos, picores, ardores, lagrimeo, nos molesta la luz y dependiendo del tipo de conjuntivitis puede que aparezca mucosa. Las personas con ojos secos o determinadas alergias sufren con frecuencia este tipo de problema. Si tiene pensado operarse la vista con láser deben informar al oftalmólogo de estos problemas.

Conjuntivitis alérgica

Se desencadena cuando entramos en contacto con un agente alérgeno. Para algunos el problema pueden ser los ácaros, para otros el polen de ciertas plantas o árboles como los cipreses.  Si sueles sufrir conjuntivitis alérgica, lo ideal es evitar ambientes con mucho polvo o polución. También puede ser bueno limitar  el contacto con animales y las salidas al campo. Cuando viajamos en coche u otro medio de transporte, mejor subir las ventanillas.

A nivel doméstico, para prevenir la conjuntivitis trata de pasar la aspiradora con frecuencia. Así eliminamos en la medida de lo posible los restos orgánicos, el polvo y otros alérgenos. Mantén las ventanas cerradas los días de viento, sobre todo si vives en plena ciudad o rodeado de campo que puede inundar de polen el ambiente.

Conjuntivitis bacteriana o vírica

La conjuntivitis bacteriana o vírica, como su nombre indica, son provocadas por bacterias o virus respectivamente. Ambas son muy frecuentes, especialmente durante los meses de invierno cuando también nos ataca el virus del resfriado. Aunque perfectamente la podemos pillar por contagio cuando nos prestan una toalla, maquillaje o cuando nos bañamos en piscinas públicas.

Conjuntivitis y lentes de contacto

Los usuarios de lentes de contacto conocen bien esta enfermedad. Cuando no se cuida la higiene en el mantenimiento o la manipulación de las lentillas se dispara el riesgo de sufrir una conjuntivitis infecciosa. Si esto ocurre, en seguida debemos retirar las lentillas y acudir al oftalmólogo.

Para prevenir la conjuntivitis los especialistas nos recomiendan lavar las manos de forma habitual. Además es conveniente evitar el uso de productos cosméticos de otras personas y sus toallas de aseo. Debemos evitar bañarnos en piscinas que parecen poco higiénicas o bien con mucho cloro. Salir de casa siempre con gafas de sol, porque protegen nuestros ojos de las radiaciones solares, del polvo y otras partículas.

Si de buenas a primeras sientes quemazón o picor de ojos, estos enrojecen, o sientes que se te ha metido algo en el ojo y lagrimeas de forma continuada, entonces conviene consultar al médico u oftalmólogo. Es probable que estés sufriendo una inflamación de la conjuntiva, más conocida como conjuntivitis.